10 de julio de 2020
Ayer por la mañana, se reunieron el presidente de la Generalitat, Quim Torra; el vicepresidente del Gobierno y consejero de Economía y Hacienda, Pedro Aragonés; la consejera de la Presidencia y portavoz del Gobierno, Meritxell Budó; el consejero de Interior, Miquel Buch; la consejera de Salud, Alba Vergés; el consejero de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias, Chakir el Homrani; y la consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, Teresa Jordà; el delegado del Gobierno de la Generalitat en Lleida, Ramon Farré; el concejal jefe de Lleida, Miquel Pueyo; presidente del Consejo Comarcal del Segrià, David Masot; y el presidente de la Diputación de Lleida, Joan Talarn, para hacer un seguimiento de la evolución de la Covid-19 en el Segrià.
Tras la reunión, la consejera de la Presidencia, la consejera de Salud, y la consejera de Agricultura han comparecido en rueda de prensa para informar de las medidas tomadas y la actualización de datos del rebrote de coronavirus en el Segrià.
Para evitar el contagio y la propagación de la Covid-19, la consejera Budó ha anunciado que "las personas de más de seis años están obligadas al uso de la mascarilla en la vía pública, espacios al aire libre y en cualquier espacio cerrado de uso público y que se encuentre abierto al público, con independencia del mantenimiento de la distancia física de seguridad".
En el marco de esta reunión, la consejera Budó también ha explicado que "hemos pedido a los ayuntamientos ya las entidades locales que pongan a disposición aquellos equipamientos públicos que sean necesarios para hacer aislamiento correcto de todas las personas que puedan dar positivo en una PCR o sus contactos, y no tengan la posibilidad de aislarse en las zonas donde están viviendo". Para garantizar el funcionamiento y la gestión de estos locales, desde el Gobierno se ha decidido poner a disposición de los ayuntamientos y del Consejo Comarcal del Segrià un fondo extraordinario que permita inyectar liquidez para garantizar la gestión de estos equipamientos. "Es un gasto sobrevenida por los municipios y desde el Gobierno los queremos acompañar, también en este gasto. Siempre hemos dicho que queremos trabajar de manera coordinada y siendo aliados del mundo local. Y, en estos momentos, estamos trabajando coordinadamente con alcaldes, Consejo Comarcal y la Diputación desde el minuto cero", ha insistido Meritxell Budó.
La consejera de la Presidencia ha querido insistir en que "desde el Gobierno tomaremos todas aquellas decisiones que sean necesarias; pero siempre teniendo en cuenta los datos epidemiológicos y los criterios de las autoridades sanitarias". Y ha recordado la importancia del uso de la mascarilla, distancia e higiene de manos para evitar el contagio.
Ayer por la mañana, también se reunió el Plan de actuación del PROCICAT para emergencias asociadas a enfermedades transmisibles que ha considerado que en esta nueva etapa de reanudación es esencial profundizar en la necesidad de un comportamiento social comprometido en la lucha contra la pandemia , fundamentado, entre otras medidas básicas, en el uso de mascarilla como medida de protección individual y colectiva en el desarrollo de las actividades que pueden generar más riesgo de transmisión.
La detección de varios brotes y el incremento de nuevos casos obliga a reforzar las condiciones de uso de las medidas de protección y, específicamente, el uso de la mascarilla.
Sin embargo, no se modifica el régimen de exenciones a esta obligatoriedad, por razones personales y de la naturaleza de la actividad, por lo que no será necesario que la lleven, por ejemplo, personas con dificultad respiratoria que pueda agravarse por su uso o que lo tengan contraindicado por razón de salud o discapacidad. Tampoco será exigible en el caso de ejercicio físico deportivo al aire libre ni cuando por la propia naturaleza de las actividades del uso de la mascarilla resulte incompatible.